SIN RESPUESTAS A LA URGENCIA MÉDICA –

Jonatan Centurión trabaja en la Municipalidad de Moreno, más precisamente en el Instituto de Desarrollo Económico Local (IMDEL). Mayra, esposa del joven, denuncia: «Lo que está haciendo IOMA es una claro abandono de persona».

El 14 de febrero cayó al piso mientras se dirigía su casa en el barrio Manantiales. Sufrió la fractura del maxilar. La obra social IOMA rechaza la prestación que los médicos de la Clínica Provincial de Merlo demanda con urgencia:

Tres (3) placas de titanio sistema 1.5/2.0 bloqueada y tornillos; una (1) placa de titanio sistema 2.4 bloqueada, seis (6) tornillos lmf y alambre de 0.5m.

CUADRO SOCIAL

Jonatan, padre de dos hijos /as, debe caminar más de veinte cuadras para acceder al transporte público. Junto a su esposa, Mayra, subsiste en una casilla de madera que proveyó la Municipalidad de Moreno, entrega que se realizó junto al lote. La unidad habitacional aún no tiene piso de concreto ni pozo. Las chapas están sujetas a los tirantes de forma precaria. Su hija padece de problemas respiratorios; su hijo tiene capacidades diferentes.

El joven de 30 años de edad se dirigía a su casa el 14 de febrero. Llevaba en sus dos manos las bolsas de alimentos cuando tropezó con una piedra y cayó al piso. Crisanta (madre de Jonatan) junto a Mayra, lo trasladan hasta el Hospital Mariano y Luciano de la Vega donde «rechazan al paciente porque había mucha gente y no era una urgencia». Se dirigen a un consultorio privado, abonan 700 pesos y desde allí regresan al Hospital que se ve obligado a practicar una radiografía. El dolor de Jonatan era insoportable, aún así no ingresa al Mariano y Luciano de la Vega. Debe viajar al Hospital Posadas sin obtener asistencia. Termina en la Clínica Provincial de Merlo donde ruega que IOMA autorice los insumos que los médicos reclaman con urgencia porque la «demora» pone en riesgo su vida.

Jonatan trabaja desde hace un año en el Municipio de Moreno. Se le descontó todos los meses el dinero que corresponde a la obra social.