El 25 de octubre de 2019, el abogado Fernando Gabriel Karpelian, en representación de Sandro Silva, presenta la denuncia penal por «estafa agravada y malversación de fondos» contra las máximas autoridades del Sindicato de Trabajadores Municipales de Hurlingham, Carlos Lanzillota y Humberto Bertinat. La causa queda en manos del fiscal Sergio Dileo, UFI N° 6 del Departamento Judicial de Morón. Las pruebas aportadas son concluyentes en un punto central: el 5 de junio de 2017, Bertinat y Lanzillota firman un documento en el que reconocen que el Sindicato reconoce tener una deuda con el señor Gustavo Fischy (prestamista) por el monto de 2 millones de pesos que fue adquirida por consentimiento del Sindicato, la cual comenzará a abonarse en cuotas a partir del mes de julio de 2017, aceptando que por cualquier circunstancia responderá con el inmueble ubicado en la calle Pedro Díaz 315.
Todo tiene un comienzo y allí ingresa la persona que hoy se siente bajo amenaza del poder sindical, político y judicial. Sandro Silva es un hombre que tiene experiencia en el mundo de la política. Señala que conoció y trabajó con los ex presidentes, Carlos Menem y Néstor Kirchner. De buen vínculo con el ex intendente de Hurlingham (Acuña), acerca al Sindicato Municipal a Gustavo Fischy (con quien tenía un vínculo familiar) atento a una opción de acuerdo: el gremio buscaba financista y Fischy decidió «invertir» 137.489 dólares.
Posteriormente, Sandro Silva le ofrece a Fischy la venta de su propiedad a cambio de convertirse en el acreedor del Sindicato, con la seguridad que los pagos se iban a producir, tomando ese rumbo en pos de dejar a sus tres hijos el dinero de la operación (Silva estaba en trámite de divorcio).
La imputación hacia las figuras gremiales tuvo impulso. En octubre de 2019, el fiscal notifica al Juez de Garantías las acciones dispuestas y llama a declaración testimonial a Fischy y al abogado Karpelian. La instrucción luego tiene un notable freno.
Sandro Silva define el cuadro al que está decidido a seguir enfrentando.
Bertinat se convirtió en concejal de La Cámpora, además de continuar como Secretario General del gremio de municipales. Tiene el apoyo incondicional de la máxima autoridad de la Federación de Municipales, Oscar Ruggiero. Además, Humberto Bertinat ostenta el cargo de Director Gremial en el IPS. Como hombre del PJ tejió una buena relación con el hijo de la Vicepresidenta, Máximo Kirchner.
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