¿MUERTE O ASESINATO EN EL HOSPITAL DE MORENO?
Es sábado por la tarde y en una humilde casa de Catonas una mujer mira la foto pegada en la puerta de ingreso. Es la de Nicolás, el hombre de la familia, el pibe de 18 años de edad que ya no está físicamente presente. La crónica oficial dice que Nicolás Pelayes murió el lunes pasado en el Hospital Mariano y Luciano luego de tirotearse con la policía en el barrio San José, suceso que dejó a un policía vestido de civil con un balazo en la cabeza. Esa es una causa penal que debe investigar si Nicolás es autor del disparo que hiere gravemente al policía Ángel Escalada.
Otra causa es la que ocurre en el Hospital porque para la familia del joven la policía torturó y personal de salud encubrió la tarea que provoca el deceso de Nicolás.
La existencia de videos, fotos y declaraciones (que podrían llegar a la justicia), son pruebas más que valiosas para desentrañar un caso que vincula a la institución policial con la institución de salud. Alguien filmó un procedimiento médico efectuado a Nicolás Pelayes, que estaba en una camilla y esposado. El Hospital Mariano y Luciano de la Vega con sus autoridades deben aclarar “en forma urgente” por qué se produce esa intervención “médica, quién lo registra en una cámara y luego lo reproduce bestialmente por las redes sociales”.
Ese video y las fotos del paciente Nicolás Pelayes dan cuenta de un cuadro diagnóstico y por lo tanto una historia clínica. Yesica Pelayes, madre del joven, estuvo desde las 21 horas del domingo 20 de enero en el Hospital sin que nadie le comunique qué tenía su hijo y qué hacían con él. Es ella quien enfrenta durante horas a personal policial, femenino y masculino, que ejerció maltrato, violencia y amenaza hacia una mujer que sólo quería conocer el estado de salud de su hijo. Sólo rumores y nunca una palabra médica oficial. Dice Yesica que “los policías entraban y salían constantemente del sector donde estaba alojado y esposado su hijo (la guardia).
Un trago de agua fría contiene un llanto profundo. Yesica repasa todos los momentos de esas horas en las que siempre pensó que debía luchar para demostrar que su hijo no le disparó al policía. Pensó en cómo sostener al resto de sus hijos siendo jefa de familia. Hacía cálculos mascullando bronca pero convencida que Nicolás salía del hospital hacia un calabozo y a partir de ahí una pelea con la justicia. La sensación no fue meramente subjetiva. La escasa información que obtuvo refería a un cuadro estable a pesar del o los balazos. “Mi cabeza estaba en que mi hijo iba preso pero yo iba a buscar las pruebas para demostrar que no era como lo estaban acusando. En ese tiempo que estuvo en el Hospital recibí maltratos y nunca me dejaron ver a mi hijo. Les pedí que aunque sea me dejaran mirarlo de lejos. Nunca imaginé que podían hacerle todas las cosas que le hicieron. Había muchos efectivos policiales que entraban y salían, tuve fuertes discusiones con mujeres policías que me empujaron, me decían ojalá que se muera. En la comisaría Moreno 1ª también me maltrataron porque decían que mi hijo había matado a un policía, y yo les respondía que eso lo tenían que demostrar porque están los videos y estoy segura que mi hijo no hizo eso. A mi hijo lo asesinaron, lo rompieron por dentro y por fuera, me entregaron un monstruo y lo tuve que velar con el cajón tapado”.
AUDIO 1 YESICA
¿Cuándo y en qué momento la notifican que Nicolás falleció o esa noticia se la comunican a tu hija?
Tuvo que venir mi hermano porque pasaban las horas y no me daban ninguna información, me estaba volviendo loca junto a mi hija que está embarazada y la empujaron. Me decían que ya bajaba el director pero eso nunca ocurrió. Junto a mi hermano nos vamos a la Comisaría Moreno 1ª y él entra porque a esa altura ya no quería escuchar nada. A él le dicen que mi hijo falleció. Me agarra un ataque de nervios porque no entendía lo que estaban diciendo porque al mediodía expresaron que Nicolás estaba bien, que tenía un solo tiro y después me entero que eran cuatro disparos. Incluso el policía que estaba en la puerta de la guardia me hace entender que mi hijo estaba mejor que yo…
Esas horas que estuviste en el hospital tenías la certeza que estaba herido pero no había riesgo de muerte
Sí porque lo poco que me decían era que estaba estable. Pregunté si le habían sacado la bala y respondieron que sí y que solo estaba tapada la pierna. Reeuerdo que consulté si podía comprarle un sándwich a Nicolás y me responden que seguro había comido porque eran las 12 del mediodía. Cuando entraba alguien de traje pensanba que era alguien de la fiscalía y que luego de eso se levantaba la incomunicación y ahí podía ver a mi hijo.
AUDIO 2 YESICA
Mientras estuviste en la zona de guardia, ¿nadie dijo algo sobre lo pasaba con Nicolás?
Sí, me siento al lado de una persona quien me dice me da cosa decirte esto pero a tu hijo lo mataron a palos cuando bajaba del patrullero. Le decían te voy a plantar algo, vos sos un gato, le pegaron tanto que me dolía hasta a mí, me cuenta esta persona. Cuando me entero que mi hijo fallece le pedí por favor si podía declarar pero me responde que no podía poner en riesgo su fuente de trabajo.
¿Trabaja en el Hospital?
Afuera. Le dije que por favor declare porque no puede quedar impune lo que le hicieron a mi hijo. Yo estoy destrozada porque él era el hombrecito de la casa, era quien hacía todo para protegernos. Si hubiese cometido un error lo iba a pagar, como madre y sus hermanos íbamos a estar con él. Sucede que le hicieron pasar tanta vergüenza, de haberlo lastimado y denigrado como hombre adelante de tanta gente. A mi hijo lo torturaron y eso ocurrió a la madrugada y lo que más me duele es que yo estuve ahí afuera y no pude hacer nada. Los que lo hicieron sufrir quiero que la paguen, yo no voy a ver más a mis hijos pero quiero que esos médicos malditos, que la policía, los enfermeros, el que filmó a Nicolás, quiero que todos paguen porque sabían lo que le estaban haciendo a mi hijo.
AUDIO 3 YESICA
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