El lunes será el día de la confirmación que la justicia electoral no hace lugar a la presentación de La Esperanza de Todos: lo partidario interpreta la ley llamada PASO.

Pero esa corriente que se opone al gobierno de Mariel Fernández hará campaña por Cristina y Axel porque la tierra prometida está en 2023. En este espacio del Frente de Todos, Anahí Sanchetta es una de las voces que amplía las críticas y toma el escenario posible y traza la navegación:

Imaginemos que no hay interna, ¿qué van a hacer con toda esta fuerza, este músculo que han construido? Acompaña a nivel nacional y provincial ¿y lo local?

A nivel local no hay instancia de ningún acuerdo, no vamos a acompañar al nivel local porque estamos convencidos y convencidas de que no se están haciendo las cosas bien sí y esta decisión de esto de bajar la lista, la dedocracia, la naturalización de las injusticias, la naturalización y la reproducción de las política patriarcal. No nos olvidamos que tenemos una intendenta mujer, digamos que tuvo una oportunidad histórica de no reproducir la política patriarca y las terminada reproduciendo. Esta posibilidad de discutir qué poder queremos ejercer y no lo discute y nosotras, nosotros desde La Esperanza de Todos estamos convencidos de que, otra forma de hacer política es posible, nos estamos preparando para pensar un Moreno mejor para todos y todas para el 2023. En nuestro proyecto, siempre lo dijimos, estas elecciones son circunstanciales más allá de que vamos a hacer todo lo que diga la ley para poder ser parte de este proceso electoral, nosotros ya hicimos las presentaciones correspondientes ante la justicia que también tenemos esa instancia, la ley prevé la instancia de apelación administrativa y después siempre tenemos la instancia judicial. Estamos convencidos de que las personas que están en la lista, pueden representar a los vecinos de las vecinas del Moreno.

¿Cuánto hay de consecuente en el ejercicio de la política para que la derecha no avance y cuánto hay de obsecuencia para cerrar y no mirar lo que se tiene que corregir hoy para no lamentarlo mañana?

Para mí la obsecuencia siempre termina perjudicando absolutamente todos los procesos. Me parece que hay algo que no estamos acostumbrados y acostumbradas y es a discutir para construir, la unidad se construye, no se impone y si vos no tenés el canal de diálogo, no construís el diálogo, es imposible, hay que hacerse cargo también de esto, hay que hacerse cargo de no tener la capacidad de construir el diálogo, de no condenar y poder abrazar a todos y todas para que se sientan parte de un proyecto y eso bueno, obviamente trae consecuencias. En las Generales está la discusión si la derecha nos gana o no nos gana, que yo estoy convencida de que no, lo que pasa es que bueno, ahí los que tienen las responsabilidades políticas se tienen que hacer cargo de cómo conducir o no conducir.

Para mí lo que ha hecho Mariel Fernández explícitamente es no conducir a todos y a todos porque no es esa su apetencia política, es más a Coco Lombardi lo llamaron para que sea el puente con el peronismo y estuvo tres meses. Días atrás se fue del IDUAR Carlos Benítez, me parece que hay ejercicio explícito de Mariel Fernández de que es a su manera

Está bien, igual cuál es la manera también porque tampoco queda muy claro, es ida y vuelta, cómo que hacés una cosa, pero decís otra y después te das cuenta de que ese no es el camino, es como prueba y error.

Sí, pero vos dijiste algo en esta charla que me parece importante después seguir buscándolo, si el ejercicio del poder visualiza la cuestión de género o no, que quiero decir, si la práctica es patriarcal aún cuando la mujer lo ejerza y repite lo que hace el hombre y lo dijiste, no al pasar, sino señalando porque se rechaza una PASO. Yo recuerdo que fueron las mujeres que pidieron primarias abiertas simultáneas obligatorias en la gestión de Festa y se logró y fue un esfuerzo muy importante y ahora no, ¿sería eso o lo entendí mal?

Sí es eso, a mí me parece que las mujeres tenemos la obligación, sobre todo quienes están en lugares de decisión es discutir el poder, el ejercicio de poder, eso es lo que tenemos que hacer nosotras las mujeres y lamentablemente, yo veo que quienes están en el poder y acá no hablo solamente la Intendenta, hablo de legisladoras, concejalas, diputadas que no discuten, no discuten qué poder queremos ejercer, entonces se termina reproduciendo esto que te digo que es el poder patriarca y lo terminás naturalizando y justificando las injusticias y lo reproducís, lo reproducís porque también hay una comodidad en eso, es incómodo discutir, obviamente que es incómodo, es difícil estar en ese lugar de dar la discusión constante, no es fácil.

Es desgastante

Es desgastante, claro que no es fácil, pero me parece que ese es el rol que tenemos las mujeres y también creo que nuestra generación que vivió el menemismo, que mataron a nuestros compañeros y los que vimos la represión, me parece que nosotros tenemos la obligación también de repensarnos en las formas de hacer política, tenemos que hacer otra interpretación también y esa interpretación llevarla a la práctica.