Todo está expuesto y en la medida que la letra chica sale cobra más claridad que la reforma tiene garantizado un impacto social gigantesco para evitar, como dicen las reconocidas autoridades, una hiperinflación.
La quita de subsidios al transporte, agua, gas y electricidad serán de aplicación a partir del 1 de enero de 2024. No está definido el valor del pasaje pero si que las empresas, con sus respectivas Cámaras, van a colocar los precios al quedar liberados de la mano del Estado.
Los productos básicos, la comida, los alimentos, tendrán una trazabilidad del 80 por ciento. Vuelan y los salarios caen. Devaluación de la moneda y aumento en los combustibles.
Días plagados de novedades y como si se tratase de un surrealismo sin magia, este diciembre de 2023 lleva en su bolsa navideña un AJUSTE FENOMENAL… a dos décadas de lo que algunos /as bautizaron como «el argentinazo»
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