Espacio Publicitario

publicidad
publicidad
publicidad

Dato central: lo que hoy se llaman barrios 1 de marzo y 1° de Mayo deben inscribirse en dos tomas que la gestión Mariel Fernández no pudo levantar en el año 2020. Es un macizo de 21 hectáreas atravesado por la ordenanza de vacancia. Ese pedazo de tierra no presenta total ocupación de viviendas, de material o madera. El tiempo fue consolidando el hábitat y desde el gobierno se evaluó reagrupar las familias más que una relocalización

El día de Evita Eterna, el 7 de mayo de conmemoración, la Municipalidad de Moreno con el IDUAR, Secretaría de Seguridad, también la de Justicia y Derechos Humanos, máquinas y topadoras, efectivos policiales a pie y la Caballería, trabajadores /as cooperativizados, avanzan por la calle Oyuela hasta un barrio que se inició como asentamiento el 1 de marzo de 2020. Enfrente de ese conjunto de viviendas precarias está el barrio 1° de mayo (fecha de inicio de la toma el año pasado. El gobierno de Mariel Fernández despliega el operativo con la consigna – bandera identificatoria: Moreno libre de tomas, todo un cambio radical de la actual mandataria respecto a su reconocidísimo tiempo de militancia (que no lo abandona de ningún modo) como figura central del Movimiento Evita.

Las casillas sin habitantes e incluso una construcción de material consolidado, son barridas por el Estado bien presente. No fue un lanzamiento pacífico ni humanitario porque los hombres y mujeres que buscan arraigarse en el barrio 1 de Marzo no están, pero hay testigos del procedimiento quienes intentaron frenar la acción.

La fuerza fue más que la interpretación social o, en el caso de análisis, el gobierno de Fernández no condena la ocupación irregular de tierras solo las repele, las combate. Luego de «peinar» la zona, el Estado planta el cartel: «El cuidado de los Espacios Comunes depende de Todos y Todas»:

Dos días después, 6 personas son detenidas y llevadas a la dependencia policial de Cuartel V. Por supuesto que no hay organización social que denuncie el uso de la fuerza y violencia, un cambio de época que deja sin argumento a las estructuras liberales y de derecha quienes no pueden cuestionar una medida que durante tantos años han denunciado como parte de la explosión demográfica del distrito. Por esos designios no calculados, una mujer que se llama Hebe, madre de territorio, describe: «El día viernes 7 de mayo se acercaron acá de manera violenta tirando casillas, chapas, alambres, se han cargado en camiones que no sabíamos las patentes porque nunca se pudo ver, nunca mostraron una orden de desalojo, alguna credencial aquí que pertenecían y arrasaron con todo. Como ustedes pueden ver no quedó alambre parado; no nos dieron explicaciones dónde se han llevado lo que era casillas, chapas, cosas de las personas, hasta sino llegaban sacaban la tele, lo que tenían adentro las personas. El que tiene un trabajo obvio que sale a trabajar, cuida su trabajo. Esto fue no solo el día viernes 7, volvió a repetirse el día miércoles siguiente a la semana. El día sábado y domingo fueron arrestadas 6 personas«.

¿Fueron arrestadas porque la denuncia que puede pesar es que venden los terrenos?

No fue por ese tema, fue porque un vecino estaba con su casilla tratando de levantarla, vinieron y le dijeron que no siga, y él muy respetuosamente les dijo que bueno, ustedes no muestran papeles, nada, solamente por ese simple hecho lo llevaron preso. Y así fueron 6 personas más, los tuvieron detenidos en la comisaría de Cuartel V hasta las doce de la noche, así que no nos dan explicaciones, vienen y arrasan con todo, con mucha violencia, con mucha autoridad, dicen pertenecer a quien pertenecen, pero no muestran ninguna credencial, no hubo ninguna orden de desalojo, si era una orden de desalojo nunca nos dijeron nada, a los vecinos nadie nos avisó que esto iba a suceder. Se presentaron con fuerzas policiales, y arrasaron como ustedes pueden ver.

Esas personas que tenían una casilla aquí, ¿vivían o estaban por vivir? Porque muchos como dijiste vos en tu explicación están trabajando para imaginar que en éste lugar pueden montar una casilla y mañana construirse una casa

Justamente así es, muchas de las personas viven, están, y muchas por el tema pandemia, por el tema situación económica, alquilan. Están alojados con su familia, con sus suegros, amontonados, no les da. Yo me crucé con una vecina que me dice “yo soy madre soltera, tengo criaturas, tengo un trabajo de dos días y tengo para darle de comer a mis hijos”, no pueden comprarse una casilla precaria porque todo es dinero, entonces no es porque no estén acá viviendo porque no quisieran habitar este suelo, esta tierra, porque nos han prometido que esto iba a ser un barrio, con todo, nos han hecho ilusionar, han jugado con nuestros sentimientos, con nuestros sueños, se lo pueden decir los vecinos, de la forma que vinieron, interrumpieron, hicieron, fue muy violenta porque nunca se avisó a nadie lo que iba a suceder.

Las personas que habían puesto la casilla aquí y hoy no tienen nada, ¿saben en dónde están sus pertenencias? ¿Se fueron del barrio?

Algunos volvieron con sus familiares o alquilan, y otras están con las suegras, con algún pariente, hay un hombre que quedó con sus dos hijitos en la calle, le tiraron la casilla, su mujer internada, acá no tuvimos asistencia, en ese momento de lo sucedido nadie se presentó a ver. Tenemos fotos, tenemos videos, tenemos todo como los chicos miraban lo que sucedía y lloraban con sus madres, corriendo porque le tiraban lo único que tenían, una casillita, fue muy horrible, mucha violencia, mucha humillación hacia las personas.

AUDIO 1 HEBE

Orleidis vive en una casa prestada de material, precisamente en el barrio 1 de Marzo. Junto a su compañero llegó de la República Bolivariana de Venezuela. Juntaron cartones, latas, todo aquello que puede venderse como material reciclable y, peso a peso, acompañados por familias paraguayas comenzaron a levantar su casa de ladrillos y cemento: «Actualmente vivo acá en 1° de Marzo porque me prestaron una casa, hace tres años que estoy en Argentina, pasé por muchos trabajos, estuve en situación de callee, he estado en alquiler, y cuando no pude pagarme más alquiler me sacaron y tuve que buscar manera de una casa, prestada o algo, hacerme una casilla. Por no tener el recurso, me prestaron una casa y vivo acá en 1° de marzo. Yo era la única pero después llegaron toda ésta gente que de verdad lo necesitaban, llegaron armando un pedacito de madera, armaban, me acuerdo que con palos y lonas hacían, y dormían; cuando llovía se mojaban, yo también porque mi casa se mojaba también. Después el dueño consiguió chapas y me trajo, pero después de un largo tiempo, me mojaba, pasaba frío con mis nenas, y bueno después de a poco, un terreno, 10 x 8, a 40 mil pesos me vendieron, pero a cuotas, de a $500 o como pudiera el señor me dijo y así fue. Así lo pagué y de a poco me levanté mi casa.

¿Cómo lograste levantar tu casa? Nadie te regaló nada, viniste de Venezuela asumiendo un enorme riesgo, un enorme desafío para vos acompañando a tu familia, y encontraste en las latas una posibilidad de peso por peso para comprarle a alguien un terreno y levantar tu casa

Mi marido allá en Venezuela era abogado, cuando llegó acá no sabía nada, lo buscaban para hacer construcción y él iba, pero bueno no tenemos DNI y solo andamos con la precaria y no nos aceptaban, él de a poco trabajaba un día y al otro día no paraba, recogíamos latitas, cartón, muchas cosas que se venden acá, el cobre y bueno, lo vendíamos y de a poco fuimos juntando la moneda, y compramos ladrillos por ladrillo, los fierros, los vecinos nos veían cuando andábamos. La gente a veces habla, pero bueno recogíamos la latita, pero no nos da vergüenza recogerla porque es algo que está en la calle, ¿sabe qué da vergüenza? Robar, eso sí da vergüenza, pero no lo hacemos nosotros, vamos, recogemos la latita, cartón, juntamos; en muchos merenderos me voy con mi marido, las nenas, y nos dan comida, nos dan una mano.

La Municipalidad cuando hizo este procedimiento, cuando vio la casa que estás levantando, ¿qué quiso hacer?

Ellos quisieron poner el cartel también porque dicen que está en construcción, no la terminamos. No la he terminado porque no tengo la plata, ¿tú crees qué si tuviera la plata no la terminaría? Quisiera vivir en algo propio y entonces ellos me iban a poner un cartel y yo les dije no. Entonces después andaba la máquina y en algunas partes pasaron la máquina, también estaba por allá la policía tirando todo lo que encontraba y nosotros estábamos ahí, a nosotros nadie nos tira eso porque la Argentina no nos las dio.

¿Qué es lo que te pasó mirando las máquinas, la policía, la violencia, las pérdidas de un pedacito de madera que es un pedacito del derecho o el sueño de la casa propia?

La verdad empecé a llorar, tenía un sentimiento por mis hijas, vinimos de un país emigrando por la situación fea que está pasando en mí país que se llama Venezuela y ver esta situación que tiran cosas tenía miedo, y yo le digo a mi esposo vamos a quedarnos acá en nuestra casa, sobre nosotros la van a tirar, sobre mí van a tirar mi casa porque yo no voy a dejar que tiren mi casa, ni tú ni nadie porque a mí nadie me la dio, esto es mío como van a tirar algo que yo lo he sudado, que yo he pasado frío, a veces comimos pan con huevo para tener la casa; y la chica del IDUAR nos dijo “te damos un plazo de tres días para que te armes algo o le pongas el techo y vivas, el día que vengamos tienes que estar viviendo” y bueno, hicimos esa casilla, que nos prestaron también y nos metimos ahí el día siguiente y encontramos que estaban haciendo fogones, y dijo “bueno, se quedan” y ahora están en proceso de hacernos un papel que te dan para que vivas vos ahí, ellos están en el proceso ahora pero dijo que a la larga van a pagar la casa, y le digo ¿pero cómo vas a volver a pagar? Esa es la cuestión acá

AUDIO 2 ORLEIDIS