El 14 de agosto el gobierno nacional aplicó la devaluación del peso. El 22 por ciento provocó una catarata de remarcaciones. Los precios de productos elementales carecen de referencia. Un kilo de pan merodea los 1000 pesos. No hay salario medio que alcance, mucho menos un plan social que contenga.
Machi Cabrera, máximo referente del Frente Argentino Revolucionario (FAR) en Moreno, desliza una inquietante hipótesis: «Si este gobierno, el de Cristina y Alberto, no toman medidas a favor del pueblo habrá saqueos». Sus argumentos recorren el camino serpenteante del Arroyo Las Catonas donde él y sus compañeros militan la subsistencia.
Peronista de Perón, tal como se define, explica por qué una figura como la de Javier Milei llega con su mensaje a los sectores más vulnerables, como una síntesis acabada de la gigantesca crisis de representatividad que goza la dirigencia en su conjunto:
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