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Izquierda Diario.- En medio de la disputa entre la Corte y el oficialismo por el Consejo de la Magistratura, este miércoles las comisiones del Senado empiezan a debatir propuestas para modificar la Corte Suprema de Justicia ampliando sus miembros.

El Senado comienza a discutir el tratamiento de tres iniciativas presentadas por senadores del oficialismo y algunos de sus aliados para modificar la Corte Suprema. Este miércoles se realizará un plenario de las comisiones de Asuntos Constitucionales y de Justicia y Asuntos Penales desde las 12.30 en el Congreso para avanzar en una agenda de audiencias con especialistas en la materia.

Dos de los proyectos proponen la ampliación de los miembros de la Corte: el de Adolfo Rodríguez Saá, del Frente Nacional y Popular, de 5 a 9 miembros, y el de Alberto Weretilneck, de Juntos Somos Río Negro, a 16 miembros.

La iniciativa del Frente de Todos para cambiar la composición de la Corte Suprema ampliando sus miembros surgió luego de que Rosatti, su presidente, asuma como titular del Consejo de la Magistratura, dejando en mayor debilidad al kirchnerismo para influir en la designación de jueces federales y abriendo una escalada de mayor confrontación entre la Corte y Cristina Kirchner.

Aunque el oficialismo cuenta con la mayoría necesaria en la Cámara Alta para darle media sanción a un proyecto que proponga modificar la Corte, al llegar a Diputados no le tendrían los votos para ser sancionada, corriendo la misma suerte que la media sanción al proyecto de reforma al Consejo de la Magistratura. Juntos por el Cambio ya advirtió que no apoyará esta propuesta si llegara a la Cámara Baja.

Incluso si el oficialismo obtuviera las mayorías necesarias para hacer pasar la reforma, los nombramientos de jueces de la Corte necesitan ser aprobados por dos tercios del Senado, una mayoría con la que no cuentan. Son respuestas -por ahora impotentes- del kirchnerismo a la avanzada de la Corte en el Consejo de la Magistratura, a la cual primero llamaron golpista para después aceptar enviar los legisladores y conformarla. Pero todo parte de la misma rosca y negociación política desde hace días por el control de jueces, sin proponer cuestionar cómo son electos los jueces ni sus privilegios de casta, y con motivaciones de preservar al kirchnerismo en sus causas, totalmente fuera de los problemas en los cuales éstos inciden en la vida cotidiana de las mayorías como el desempleo, la precarización laboral, los tarifazos y cientos de ilícitos que grandes empresas cometen contra sus condiciones de vida.