Por Cristian Franco y Lorena Pereira (Prensa Obrera).- El Fondo Educativo es un recurso económico girado desde la provincia de Buenos Aires a los municipios, con fines “educativos”. Los recursos asignados para Moreno, según el presupuesto municipal votado para 2022, ascienden a 899 millones de pesos. Ya durante el 2020, la intendenta de Moreno (FdT) manifestó que eran “fondos rotativos, que se sacan, se usan y se devuelven”. Esto lo dijo cuando justificó haberlos usado para pagar sueldos, ya que la caja del municipio estaba en rojo.
Hace unos días, Mariel Fernández recorrió escuelas y declaró sentirse “muy satisfecha por usar el fondo educativo en las necesidades de los edificios escolares”. Mariel miente. En primer lugar, porque para los “edificios escolares” sólo se utiliza el 50% del fondo educativo. En segundo lugar, porque se realizan obras menores como las del año pasado: refacciones eléctricas y sanitarias; la construcción de rampas y veredas; perímetros en varias escuelas, manos de pintura. Las obras de ampliación que anunció son obras viejas que nunca se terminaron.
Este gobierno municipal reconoce la falta de jardines de infantes y la evidente negativa por parte del Estado provincial de construir nuevos. Hay 10.000 pibes sin vacantes para salita de 3. Sin embargo, planea construir cinco CDIs (Centros de Desarrollo Infantil). Estos son espacios que están en la línea de la “municipalización” de la educación y no cumplen la función pedagógica de un jardín de infantes por no contar con docentes profesionales para tal fin; en su lugar, trabajan “cuidadoras” sin título, en condiciones de contratación hiperprecarias.
Según estadísticas oficiales del 2021 hay un faltante de 400 aulas en el distrito, pero el año pasado hubo solamente ampliaciones en 4 instituciones. Este año, la planificación de “ampliaciones” no es muy esperanzadora, se ejecutarían sólo en 14 escuelas, muy lejos de la cantidad de aulas necesarias. Esto se desprende del presupuesto que votó el Frente de Todos en el Concejo Deliberante para este año.
El 50% restante del Fondo Educativo no va a “las necesidades de los edificios escolares”, como dice Mariel. La otra parte va a financiar el “carnaval federal de la alegría”, el arreglo de un museo municipal y aproximadamente 51 millones de pesos para el IMDEL (Instituto Municipal de Desarrollo Económico Local). Este último se encuentra con una caja abultada para seguir embelleciendo la precarización laboral con el verso de la “economía popular”.
Las “necesidades de los edificios escolares” son muchas. Decenas de escuelas no cumplen con los 12 puntos de habitabilidad, es decir, que no son seguras para estudiar o trabajar. Por ejemplo, las escuelas secundarias 56, 44, 46 y 68 continúan con clases en aulas modulares (containers); las secundarias 37 y 56 esperan por la construcción de sus nuevos edificios. La primaria 80, hasta fines del año pasado, tenía el patio clausurado porque las tapas de los pozos estaban rotas. Esto mismo se reproduce en muchísimas escuelas primarias, secundarias y jardines.
Siendo el distrito de Sandra y Rubén y a meses de cumplirse cuatro años del asesinato laboral, no podemos olvidarnos de que se sigue sin justicia. No están el banquillo de los acusados los responsables políticos (Vidal, Sanchez Zinny y Festa), ni tampoco están las escuelas en condiciones seguras.
Por eso llamamos a organizarnos por las infraestructura escolar, a realizar asambleas en las escuelas y organizar los reclamos. El 100% de los fondos educativos deben ir hacia las escuelas. Desde la banca del Frente de Izquierda Unidad en el Concejo Deliberante daremos batalla para denunciar todos estos atropellos a la educación pública.
MÁS HISTORIAS
Mariel planifica delegaciones estudiantiles por localidad
Cuidados y prevención durante el invierno
«Durante cuatro años vendieron la municipalización, pero la realidad es que siguen privatizando la basura»