ABORTO / REFLEXIONES, REALIDADES Y DERECHOS –
Por Patricia Rosemberg (Médica generalista, Magister en Epidemiologìa, gestión y políticas de salud. Mujer, militante de los derechos, feminista, madre, hija, esposa, peronista y convencida de una mejor forma de vivir).
En Argentina se producen 500.000 abortos por año, espontáneos, provocados, acompañados, clandestinos, inseguros, legalizados, en soledad. Y el aborto sigue siendo la principal causa de muerte vinculada al embarazo.
Si nos referimos estrictamente a lo sanitario, penalizar una práctica, tanto a la mujer como a quien la realice, lo único que hace es aumentar las posibilidades de morir de las mujeres y llenar los bolsillos de quienes lucran con la desesperación.
Una mujer que tiene la decisión de abortar, no solo no la posterga porque es ilegal sino que lo que hace es hacerlo en condiciones de mucho muchísimo riesgo.
Y entonces tenemos mujeres que se realizan un aborto con sondas, agujas, perejil, y que si llegan al hospital lo hacen tarde por miedo al maltrato, por miedo a ir presas, un miedo con fundamentos, porque aún existen en nuestra historia reciente casos como el de Belén en Tucumán, presa por sospecha de aborto y una enormidad de casos anónimos de frases e interrogatorios en las guardias como ¿qué hiciste? ¿Qué te pusiste? Te vas a morir……
Si una mujer sobrevive al horror las secuelas sobre su sexualidad, su fertilidad y todo lo que significa vivir un momento como este en soledad y clandestinidad deja marcas.
Claro que esta descripción cambia si una mujer accede a realizarse un aborto acompañado por un equipo de salud que la asista y la acompañe, el aborto es una práctica médica muy segura que en los países donde está legalizado resuelve con medicación, tal como lo recomienda la OMS (Organización Mundial de la Salud), el 90{ebfc0320d477b9bbea922f3d779ceb9307bcd251c6f562ff196dc9e57bfc6fa0} de los casos.
Si una mujer tiene dinero probablemente acceda a un lugar más seguro, con mayor limpieza, esterilidad con menos posibilidades de morir, pero en las mismas condiciones de culpabilización y clandestinidad.
Pero las mujeres que se mueren en nuestro país siguen siendo las mujeres más pobres, más violentadas y más relegadas.
Por otro lado cuando hablamos del derecho a elegir no hablamos solo de elegir en ese instante solamente sobre nuestros cuerpos, la posibilidad de elegir se construye socialmente, no creamos que está saldado la discusión porque ya no es más el rosa y las princesas patrimonio de las nenas.
La posibilidad de elegir se construye en el cotidiano en quien toma el rol de cuidador y quien colabora con las tareas, en porque aún hoy cuestionamos si una mujer provoca, a partir de que edad la sexualidad se ejerce y con cuantas y cuantos tiene que pesar en nuestra conciencia.
Es un momento histórico, para pensar, discutir, consensuar y ACTUAR porque el tiempo y la vida es aquí y ahora, solo presente
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