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A dos días de celebrar el día de la mujer, en Argentina asesinan a una niña wichí de 14 años. Hace un mes, Pamela Flores de 12 años, también encontrada sin vida en un descampado con aparente situación de abuso sexual. Por Minka Comunicación en Red Eco Alternativo.

Nacer wichí en Salta parece ser sinónimo de padecer vulneraciones que comienzan desde el momento en que se nace, ya que existen varios casos en los últimos años donde se puede ver la muerte de niños de este pueblo sin el amparo del estado. Los que logran crecer a pesar del hambre o falta de agua, viven a merced de padecer innumerables abusos sin que exista un real interés por parte del estado de resguardar sus derechos.

La niña de 14 años, Florencia Torres, fue asesinada con un arma blanca. Fuentes policiales indican que el crimen se produjo en cercanías de la Ruta Provincial 5, a la altura del cementerio de esa zona del departamento de Oran. La niña murió desangrada y sin asistencia.

Florencia pertenecía a la misión wichí de esa localidad. Hasta el momento solo hay dos hombres detenidos. Desde el Ministerio Fiscal señalaron que la menor estaba junto a un joven cuando llegó el agresor, que de acuerdo a los trascendidos habría mantenido algún tipo de relación con la víctima.

Así se inició una pelea presuntamente entre el amigo de Torres y el homicida, derivando en el asesinato de la joven. La Policía local inició la intensa búsqueda del homicida, quien tendría domicilio en el asentamiento Francini, de esa localidad.

El crimen de Pamela, la menor asesinada en enero, aún sin resolución

Pamela Flores fue encontrada asesinada por un arma blanca en el mes de enero. Su cuerpo fue hallado a la vera de la Ruta 81, cerca del acceso a la localidad de Pluma del Pato. Por el femicidio, aún permanece detenido un sospechoso de 17 años, detenido unos días después del crimen en Coronel Juan Solá, que también pertenece a la comunidad wichí. Existen testimonios que señalan que aquella noche varios niños y jóvenes de la comunidad se encontraban con un “criollo blanco de 50 años” que les proporcionaba bebidas alcohólicas.

Esta hipótesis que plantea la participación de este hombre adulto en el asesinato, al parecer no ha sido investigada por la justicia salteña, por lo que recibió varias críticas por parte de familiares de la menor, quienes incluso realizaron movilizaciones a Salta capital para reclamar mayor precisión en la investigación.