Sus brazos y piernas dan movimiento a la caja metálica que será receptora de cartón y plástico. Va cruzando por el frente del Palacio municipal y detiene su marcha. Gastón, de 42 años de edad, refiere que su tiempo de buscar otro empleo está concluido al haber encontrado en los residuos reciclables el insumo que le permite ganar 2000 pesos por día, andando 14 horas en la calle, todas las jornadas. Su descanso y comida es a la noche. Tiene dos hijos que asisten a la escuela y sueña para ellos otra realidad, otro mundo, diferente al que él enfrenta.
«Lo que más se ve en las calles es la miseria, aparte de los robos. Antes vi la miseria pero no tanto como la de hoy«, manifiesta Gastón… antes de seguir con su carro buscando aquello que le permite sobrevivir.
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