Todo por mercadería

TRUEQUE 2018 –

No es en la ordenada Plaza San Martín con su moderna calesita. A metros de ese punto donde ya no hay venta ambulante resurge la necesidad convertida en intercambio.

En la barrera Uruguay, cerrada para siempre, resiste la vieja calesita de Moreno y ésta es testigo del encuentro de hombres y mujeres que hacen del trueque un hecho real, concreto e interpelante.

Carolina es una de las organizadoras que dice por qué el trueque necesita del espacio público para combatir el hambre: “Esto nació desde que las cosas están muy mal. Antes estábamos en otro lugar y la Municipalidad nos va sacando. Este trueque nos sirve porque mucha gente no tiene plata, mujeres y hombres que están solos, y a todos ellos les sirve cambiar lo que ya no usan por mercadería. Esto también se explica porque en las casas no hay comidas para los chicos y eso nos empujó a un grupo de mujeres a unirnos y hacer cambios por mercadería”.

¿Cuándo comenzó este grupo?

Hace dos años. No es lo que queríamos, hicimos pedidos, solicitudes de ayuda, le mandamos una carta a Walter Festa pero no tuvimos respuesta alguna. Nosotros creemos que ellos no quieren que se conozca lo que está pasando en Argentina, pero aquí nos encontramos dando la pelea los días martes, jueves y sábado. Actualmente participan de este grupo unas cien personas pero cada semana aumenta y allí se nota las necesidades que tiene la gente. Si tuviéramos un lugar más grande, donde no nos ataque la lluvia, habría mucha más gente en el trueque.

¿El intercambio es por mercadería o una persona puede comprar algo con dinero?

Hay un tipo de 30 o 50 pesos que está pensando para poder cargar la SUBE y de esa manera poder venir hasta el centro de Moreno. Acá se cambia desde un parlante, electrodomésticos y ropa por mercadería.

¿Cómo es la organización del grupo?

Somos seis mujeres que administramos esto. Quisiéramos hacer otra cosa, muchas veces fuimos a la Municipalidad de Moreno y no obtuvimos nada, pero aún sin ayuda salimos adelante. Aclaro que lo que pedimos al intendente es que no nos saque del lugar que teníamos pero no logramos que nos entienda. Lo mejor para nosotras es tener un lugar con techo en especial para que las madres con sus bebés puedan llevar algo de comida a sus casas porque, como vos ves, la mayoría somos mujeres de diferentes edades que están atravesadas por la misma necesidad.

¿Pensaste que volvería el trueque?

Lo que sucede que en los grupos de venta no pasa nada, y allí pensamos en hacer el intercambio por mercadería. No somos el único grupo que hace esto, pero elegimos los días para evitar inconvenientes.