MADRE ES LA QUE LUCHA –
Soledad está rodeada por los abrazos de las compañeras del barrio La Porteña. Sostiene a su hijo (Luciano) quien necesita un alimento especial debido a una patología muy particular, poco común. Recuerda el tránsito por el Hospital Gutiérrez, la noticia de su bebé con Covid y esa insistencia de regresar a su hogar. La leche que requiere Luciano está por arriba de los 20 mil pesos (una lata) que alcanza para menos de una semana.
Utilizó las redes sociales en clamor de ayuda; denunció el sentimiento de abandono por parte del gobierno municipal. Días atrás a la casa de su madre llegó un pote de leche con un mensaje «proponiendo» que se calle. La palabra presente, sin miedo, desafiando las cobardías:
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