Estamos ante una colonización algorítmica del mundo, aseguró Miguel Benasayag, autor del libro La inteligencia artificial no piensa, el cerebro tampoco. En conexión directa con esta afirmación el filósofo y neurólogo, ofreció aumentar su explicación: “la máquina piensa de manera binaria, totalmente fuera de cualquier realidad sensible. Pero la racionalidad de los humanos es parte de un conjunto que es nuestro ecosistema y nuestra relación con el mundo”. Este primer párrafo introductorio de esta nota nos permite empezar con las hipótesis de qué queremos decir cuando hablamos de la IA y sus consecuencias a corto y largo plazo en el mundo educativo y laboral. El libro mencionado anteriormente fue escrito en conjunto con Ariel Pennissi.
Ahora bien, en relación directa con la idea central de esta nota el docente y analista sobre educación Manuel Becerra, en su portal Gloria y Loor, dispara una reflexión que permite un debate. “¿Qué hay de estas nuevas tecnologías que hemos sacralizado y que creemos que deben entrar urgente a la escuela? Si bien las bases que dieron origen a su surgimiento tuvieron el mismo recorrido de validación científica, su uso actual, masivo, está directamente a las órdenes de la rentabilidad y la lógica mercantil. No es que queremos que se enseñe blockchain o criptomonedas en la escuela porque creamos que son saberes que conllevan debates maduros y que son objetos culturales valiosos de ser transmitidos. Queremos que se enseñe porque, hoy mismo, creemos que de esa forma se va a ganar más plata. Pero uno de los grandes problemas es que el uso masivo de estas tecnologías -y, fundamentalmente, su perfeccionamiento- está al servicio de unas pocas grandes empresas que no comparten sus avances porque la propiedad privada intelectual es la clave de sus modelos de negocios”.
LA IA, EL CHAT GPT Y EL AULA
Para entender la lógica de la IA y la escuela secundaria es necesario recurrir a la voz de especialistas en la temática, por eso ANCAP dialogó con Nahuel Gonzalez, integrante de FLACSO y parte del PENT (Proyecto Educación y Nuevas Tecnologías). En la extensa charla pudimos resolver varias inquietudes en un tema que es necesario ponerlo como eje de un debate central en la educación. Nahuel, al comienzo, nos propone no tener una mirada única sobre la IA en el aula, sino que podamos evaluar los pro y los contra de un tema que a priori tenemos que entender si estamos dentro del aula o si tenemos hijos en el ámbito educativo. “La IA se acerca al ámbito educativo, se ofrece como un mundo lleno de oportunidades, como la personalización del aprendizaje y ahí podemos pensar ¿para qué la queremos incorporar? ¿Cuál es el sentido pedagógico y qué habilidades podemos dar en su uso? La idea no es repetir viejos modelos con nuevo envase, sino transformar los procesos de enseñanza”. Gonzalez completa la idea dando aviso que la IA es un complemento del aprendizaje y no funciona como reemplazo de los docentes y en esta misma línea de reflexión propone pensar que “los docentes seguimos siendo fundamentales para que los estudiantes puedan crear, desarrollar un pensamiento crítico, hoy parece que hay una mirada de prohibir el uso del celular y la IA. Yo creo que tenemos que pensar la forma en que evaluamos, si seguimos proponiendo actividades que pueden resolver la IA generativa, debemos preguntarnos qué estamos haciendo mal”. El complemento debe pensarse como un todo significativo que permita a docentes y estudiantes pensar la IA como un nuevo desafío a futuro. Este punto es clave.
Ante la pregunta a cualquier docente sobre el uso de Chat GPT y si esto mejora o no el aprendizaje, las respuestas pueden ser variadas. Los estudiantes pueden mejorar su aprendizaje, pueden tener mayor capacidad de búsqueda en menor tiempo. Como así también corren el riesgo de dejar todo en manos de la IA. Para tener claro en qué puede sumar o restar el uso de ésta en la educación vamos a empezar por una breve explicación: un objetivo importante de la IA es poder resolver tareas específicas focalizadas en un tema particular y con objetivos que sean precisos. Es una técnica generativa que puede diagramar contenido nuevo como ser por ejemplo, imágenes, audios, textos, música o videos. Sobre el Chat Gpt Nahuel analizó “Este chat nos ofrece textos que tenemos que saber cuáles son reales y cuáles no. Hoy el uso de las IA generativas permiten desarrollar algunas habilidades, sin embargo no sabemos las consecuencias que se aprenda de esta forma, no sabemos la incidencia que tendrá en la forma de pensar y elaborar en nuestra mente anticipar y llevar adelante actividades. Hay miedos como de desventaja del lado de la dependencia y la falta de creatividad, por eso tenemos que ver nuestras propuestas como docentes donde el uso de una IA generativa pueda marcar una diferencia en lo que el estudiante está haciendo, y eso sería el Para Qué”.
El diario The New York Times en el año 2023 dedicó un artículo a explicar justamente un cambio de paradigma que venía a instalar el uso de chat gpt en el ámbito universitario por ejemplo: en las escuelas secundarias de las ciudades de Seattle y Nueva York quedó prohibido este dispositivo en las redes WI FI y en los celulares con el fin de evitar trampas en los trabajos de los y las estudiantes. Esto no evita de todos modos que puedan acceder a este chatbot por otra vía. En este texto del periodico norteamericano advierten que muchos docentes universitarios decidieron modificar el modo de trabajo con sus alumnos, volcando a una práctica de tareas en clase, escritos de ensayos durante la presencia en el aula y el recurso del examen oral como factor evaluativo. “Más de 6000 profesores de las universidades de Harvard, Yale y Rhode Island, entre otras, también se han inscrito para utilizar GPTZero, un programa que promete detectar con rapidez el texto generado por medio de inteligencia artificial”, informó el artículo.
Es necesario el debate sobre qué nos espera a futuro con esta herramienta de la IA manejando el saber de los estudiantes, podemos pensarla como una ayuda, no obstante eso debemos tener en claro que estamos viendo frente a nuestros ojos una dominación algoritmica de las vidas. Las corporaciones dueñas de estas solucionadoras de temas no buscan una ayuda en beneficio de los estudiantes y el futuro de la sociedad, el capitalismo digital vino para quedarse y la IA es uno de los factores que avanza a paso firme.
LA ESCALERA DE LA IA
Nahuel, ya dijimos, es docente e investigador de FLACSO y en ese rol junto a colegas de la materia diseñaron una idea referida a los pasos principales que debemos dar para aprender a caminar junto a la IA. Esto lo divide en tres etapas que nos explicó claramente “En los escalones pensamos en primer lugar el uso instrumental de la IA a partir de las generativas de texto, imagen, sonido, canciones y ver qué podemos pedir a los estudiantes que hagan con IA y, con ese insumo qué tipo de habilidades queremos que pongan en juego, validar, debatir etc. El segundo escalón sería pensar a la IA como un copiloto, un colega que permita potenciar mi trabajo, automatizar tareas administrativas y ayudar a pensar en las planificaciones, y por último poner en tensión el marco en que tengo mi propia formación y ver como eso me interpela”.
En cuanto a dónde poner la mirada central sobre este tema de análisis tan profundo para la educación. Gonzalez expresó: “en tareas cotidianas podemos utilizarlo, por ejemplo, para reducir nuestro tiempo de trabajo, organizar nuestras tareas, pensar, por ejemplo, con la IA acerca de nuevas ideas y no iniciar un trabajo desde cero o con ese síndrome de la hoja en blanco. Poder pedirle que nos dé ciertas ideas sobre un tema como para poder iniciar un proceso de escritura. En ese sentido, como docentes, por ejemplo, ¿qué podemos hacer?Podemos, a partir de una actividad que diseñamos, pedirle que nos cree una rúbrica para la evaluación. También podemos utilizarla para automatizar ciertas tareas administrativas vinculadas al quehacer docente. Creo que su uso en particular es pertinente si justamente lo que hacemos es pensar en el desarrollo de habilidades, el pensamiento crítico. Y habilidades, digamos, lo que se conoce como habilidades blandas”.
Pasó la pandemia y dejó una educación cooptada por las pantallas. Sobre esto también cerró su reflexión “Es importante, de vuelta, pensar también en las relaciones humanas más allá del desarrollo tecnológico”. A partir de esto se abre un debate actual que no tiene aún ninguna forma definida de llevar a cabo en el ámbito educativo, bajo la pregunta de celulares sí o no en el aula. Queda claro que el debate está abierto.
EN PRIMERA PERSONA DESDE EL AULA
“Me parece, en buena medida, que nosotros estamos trabajando todos, en líneas generales, docentes, no docentes, digamos, que estamos todos inmersos en un mar de especulaciones. En primer lugar, que lo que se sabe es poco. Hablamos de la inteligencia artificial generativa, ¿no?, aquella que genera texto e imagen, y lo hace realmente muy bien, por momentos, por lo que veo yo. Lo hace bien y logra confundir, ese es un gran problema que tenemos todos como sociedad. Es muy difícil poder discernir una imagen realizada por inteligencia artificial, porque su calidad de imagen es buena”, en dialogo con ANCAP el periodista y profesor de secundaria en el distrito de San Vicente Hernán Buodo, compartió esta reflexión y sugirió otros puntos a tener en cuenta sobre este tema “Se construyen relatos a través de la inteligencia artificial que cada vez resulta más difícil poder discernir su falsedad, ¿no?, su origen falso, por un lado. Pero no tanto más que eso. La inteligencia artificial puede inscribirse dentro de esas tecnologías que indudablemente vienen a cambiar los parámetros culturales de una sociedad, en su conjunto. Y que esto acarrea problemas, miedos, sustos, suspicacias, sin duda. Pero como está en pleno desarrollo, todavía me parece que no hay ninguna mirada, no hay ningún saber sobre eso, digo, que esté asentado”, afirmó el docente con cautela sobre la IA.
Las educación hoy recorre múltiples problemas, edilicios, institucionales en varios casos, ausencias, docentes aferrados al manual kapeluz, equipos directivos desganados con la idea del compromiso. Sobre algunos de estos puntos agregó Buodo: “La educación tiene múltiples problemas, me parece a mí. Nosotros que habitamos a diario los colegios, lo vemos eso. La inteligencia artificial es uno. Sumarla a la inteligencia artificial y a este desarrollo, como es nuevo, y es de enorme relevancia, ya la estamos empezando a notar y sospechar. Bueno, en muchos casos hay una mirada negativa, de cuidado, de recelo sobre eso, como ocurrió con tantas otras tecnologías que se fueron desarrollando a lo largo de la historia del tiempo. Adjudicarle el problema de la educación y de los procesos pedagógicos a la inteligencia artificial me parece demasiado. Pero sí es un problema, sí es un problema, sin duda. ¿Cómo solucionarlo? La verdad que no lo sé”.
CAPITALISMO DIGITAL Y AUSENCIA DE LEGISLACIÓN
Argentina es uno de los países que aún no tiene ningún tipo de legislación sobre la IA. Esta situación. el investigador de FLACSO la advierte como algo multicausal desde el 2022 a esta parte. “Lo que se deberían hacer son legislaciones flexibles que se pudieran adaptar o que puedan contemplar ciertos aspectos en su formulación. En segundo lugar, hay un factor humano, en el sentido de marcos regulatorios que requieren una comprensión del problema de las tecnologías involucradas”. En línea con esto completó que debería haber una legislación que esté conformada por los países de la región y que respete la idiosincrasia de los países latinoamericanos. Hoy los gobiernos neoliberales escapan a todos los marcos regulatorios, porque todo es pro mercado, enfatizó.
No tener una legislación para el control de la IA habilita un libre mercado algorítmico de nuestros datos, donde los grandes monopolios juegan un rol central. Estamos dentro de un sistema de acumulación de datos, la cultura de lo instantáneo, lo urgente y lo artificial. Vivimos dentro de un sistema comunicacional que pasó a ser absoluto e indispensable en las vidas de todos y todas, donde el algoritmo determina desde los gustos de elección de la música hasta el desapego para un abrazo y un saludo, porque el emoji permite ser un lenguaje que nos somete dentro de la vida digital cada dia un poco más. Debemos pensar la idea de una desconexión digital para algunos momentos de la vida, la lucha por la recuperación de tiempo es primordial.
“Hoy estamos todos sobre expuestos de forma constante a información fragmentada, donde tenemos que tener una presencia activa en las redes, en medios, y esto puede reducir la capacidad de concentración y reflexión, Twitter es por ejemplo una red vinculada a la gestión del odio. Necesitamos tiempo para pensar, aburrirnos y poder compartir con el otro para ver de qué forma nos vinculamos con la tecnología y no que la tecnología condiciona nuestras vidas”, finalizó Nahuel Gonzalez.
De esta manera la nota intentó ser una ventana a la reflexión sobre lo que está ocurriendo en la educación y lo que ocurre con un mundo digital y un capitalismo cibernético que está entre nosotros. “Hoy día todo el mundo es feliz… Pero ¿No te gustaría tener la libertad de ser feliz (…) de otra manera? A tu modo, por ejemplo; no a la manera de todos”, Aldous Huxley.
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