Por Antonio Castillo, líder de OLP Moreno –
Se nos están yendo los mejores y casi anónimamente. Roberto Cirilo Perdía (nombre de guerra: el pelado Carlos) no solo fue un fundador de la organización Montoneros sino uno de su jefes máximo hasta su desaparición. Batallador contra las teorías elaboradas en el Pentágono para desprestigiar a quienes optaron por la lucha armada en tiempos que la constitución los amparaba (art. 21 C.N.) siempre detrás de la liberación nacional para nuestro pueblo, fue uno de los artífices de hechos políticos que sorprendieron al mundo como el secuestro y ajusticiamiento del General Aramburu o el secuestro de los hermanos Born para financiar la organizacion y llevar recursos económicos y humanos a otras organizaciones que libraban la misma lucha en otras partes de Latinoamérica y el mundo.
Eso le valió reconocimiento internacional a tal punto que años más tarde, jefes de estados les proporcionarían salvoconductos para no ser asesinados por la CIA.
Fue protagonista de manera directa o indirecta de todas las gestas políticas argentinas de los últimos 60 años, especialmente cuando se trataba de organizar resistencia popular. Nunca ocupó cargos públicos pero fue uno de los autores de la estrategia del «luche y vuelve» y que coronaría con 8 diputados nacionales, 5 gobernaciones (BS. AS., Córdoba, Mendoza, Santa Cruz y Salta) el rector de la UBA. Discutía política nacional e internacional con Perón. En la guerra de Malvinas mandaron un mensaje a la cúpula militar para alistarse ellos en las tropas que enfrentarían a los ingleses para no mandar conscriptos sin experiencia en combate. Ya en democracia (proscripto por el decreto 157 de Alfonsín) y desde el exilio, ante la falta de conducción del movimiento nacional, Perdía y otros armaron primero «Intransigencia y Movilización Peronista» para terminar fundando en el año 1985/6 el Peronismo Revolucionario (PR), organización que sumó una nueva generación de jóvenes formando nuevos cuadros políticos integrales. El Consenso de Washington y el menemismo con los indultos termina disolviendo está organización. Después devarios años, en febrero del 2002 se logra constituir en una fábrica recuperada (IMPA), las organizaciones libres del pueblo (OLP) a raíz del emergente movimiento piquetero en el país y juntar a los peronistas dispersos en otras organizaciones. Fue crítico del kirchnerismo ya que no modificó la matriz extractivista. Estuvo resistiendo, organizando y formando jóvenes estudiantes de CABA durante la década kirchnerista, armó la gremial de abogados/as, aportó su experiencia a la constitución de la CTEP y resistió al macrismo con la consigna «Luche y se van». Fiel a sus principios, vivió toda la vida de manera austera, en los años 90 viajaba regularmente a Santa Fe por su profesión de abogado (con pasajes que le facilitaban algunos compañeros diputados). Sin dudas un peronista de los imprescindibles hoy, no solo por su moral política-militante (ejemplo para las nuevas generaciones que la política no es una carrera sino un servicio, un acto de amor con y para el pueblo) también por su lucidez analítica dentro del actual contexto geopolítico y un optimista porque siempre creyó que es posible construir un futuro de liberación nacional y social.
Falleció Roberto Cirilo Perdía, militante montonero, popular nacional y revolucionario. Hablar de él en pasado sería injusto con su historia pues nos enseñó con su práctica inagotable y única, que las luchas de los pueblos no culminan sino hasta vencer las injusticias que las golpean.
Quienes quieran y puedan, lo despediremos mañana 21 de marzo de 9 a 14 hs, en el Sindicato de la Federación Gráfica Bonaerense, Paseo Colón 731, Capital Federal.
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