ABUSO SEXUAL INFANTIL / HABLAR, INTERVENIR
Convocada por el Foro de Infancia Robada de Moreno, María Lourdes Molina, psicóloga y especialista en violencia de género e integrante de la Red Infancia Robada, participó de una charla y debate. El Aula Magna del Hospital Mariano y Luciano de la Vega estuvo colmada de profesionales y auxiliares, referentes barriales y militantes sociales.
En diálogo con Desalambrar, Molina expuso el valor e importancia de romper los miedos, los silencios y la vergüenza que rodea al abuso sexual infantil. Como disparador, se refirió a la historia de los jóvenes (causa penal en proceso) del Club Independiente, River Plate y en la Escuela Internacional de alta competencia: “Allí hay abuso pero en el marco de una explotación sexual de adolescentes con un interés comercial por parte de otros adultos. Como son adolescentes se habla de hebefélicos, que es el adulto que se excita con un adolescente, pero quiero señalar que en la base de la explotación sexual hay vulnerabilidad, me refiero a adolescentes que están alejados de su familia, que vienen con el sueño de ser deportistas pero están solos, tienen miedo, inseguridad, y tal vez algunos sufrieron violencia y abuso. Por eso hablar de violencia y abuso en este contexto es referirse a vulnerabilidades, a historias de abandono, de soledades. En los medios se dice esto se sabía hace tiempo, pero debo señalar que yo no lo sabía siendo especialista en abuso sexual. O soy una ignorante o en ciertos ámbitos hay cosas que se tapan mucho, donde hay muchas complicidades. Una persona puede no ver pero si lo observa y no hace nada es cómplice”.
Además de esto que indica, ¿no hay organizaciones importantes?
Organizaciones y corporaciones que se encargan de silenciar
Y en lo más común, en lo cotidiano, en la familia, en un hospital, en una escuela, salvo que pensemos que se trata de algo muy alejados
No, y está tan cerca que averguenza y muchas veces se duda sobre qué es lo mejor para hacer. Hoy salió esto en la charla, más allá que el abuso sexual siempre es grave, haya o no penetración, porque puede ser el padre, el tío, el abuelo, el primo o el hermano, entonces se piensa que se divide la familia, pero en esos casos es muy importante pedir ayuda y que se tenga presente que el abuso siempre daña. Lo que no sana y se tapa baja la alfombra a lo largo de los años se agrava…
¿Cómo es el agravamiento?
Es que el patrón de conducta abusivo se reitera y con el paso de los años la conducta pasa a ser más grave. Expliqué que las primeras conductas abusivas se encuentran en los chicos a los 10 u 11 años, que es el adulto que está implicado en un abuso porque en el inicio no se intervino, por lo tanto no se le dio la posibilidad de modificar este patrón. Muchas veces se tiene la construcción que los adultos involucrados son unos psicópatas, perversos, son incontrolables, pero encuentro adolescentes con los que se pudo intervenir, acompañados por sus familias que quisieron hacerse cargo de este problema, lo que produjo un cambio en la dinámica familiar porque se comprometieron en un tratamiento y así el adolescente pudo salir de ese lugar.
AUDIO 1 MOLINA
Al hablar de intervención se refiere a que el trabajo nace en la familia quien debe romper con la vergüenza en la casa, en la escuela…
En el hospital, en el centro de salud, porque se piensa que para empezar a intervenir se necesita de una denuncia pero, en general cuando hay menores de edad, esa intervención la puede hacer la escuela, el servicio local y un centro de salud, por supuesto con la familia porque sin ella no se puede hacer nada. A esas familias que pueden leer esta nota les digo que si sus hijos, porque por lo general son varoncitos los que ejercen el abuso, les dicen que dejarán de hacerlo, deben recurrir a un especialista porque ese patrón no se va a detener. Si quieren hacer algo para que ese pibe o adolescente no termine preso, tienen que buscar ayuda ahora en un centro de salud, en alguna organización que se dedica a estos temas, involucrar a la escuela y no taparlo porque es un chico que necesita ayuda, que no puede controlar un impulso y que no nació así. Esa conducta se puede controlar pero hay que intervenir con toda la intensidad que se requiere.
En este momento llamado de posmodernidad, ¿qué gravedad tiene el abuso sexual infantil? Se lo pregunto una sexualidad que se despierta, por la cosificación de la mujer y de los niños /as, por lo tanto lo material es más determinante que lo humano
Cuanto más se cosifica y se pone al ser humano en un lugar de objeto, de estimulación, donde todo se acentúa a nivel visual que genera un placer individual, más se agravan estos patrones, hay más descontrol hacia la violencia. Cuanto hay más estimulación y ansiedad en partes de nuestro cerebro, vinculado a excitaciones y a relación de la conducta sexual con la violencia o con un lenguaje sexista, hay más riesgos de patrones sexuales con tendencia violenta.
AUDIO 2 MOLINA
Hay casos donde los niños /as son víctimas de sus padres o familiares directos. Se toma una medida de abrigo, se los separa del hogar, pero el trabajo es la revinculación. ¿Cómo puede explicarse eso que está institucionalizado?
Es muy complejo porque, por ejempo, si el padre fue absuelto, aunque estuvieran los indicadores, y los clínicos que acompañamos tenemos la convicción que el niño /a está traumatizado, los mecanismos legales desde la justicia civil son muy militados para poder sostener un proceso de no vinculación o no contacto con ese adulto.
¿Hay estadísticas de estos casos?
En algunas páginas tienen que estar pero yo no las tengo.
AUDIO 3 MOLINA
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